Desarrollo Regional

En el universo nada es estático.

Todo se mueve constantemente, en una dinámica en la que la detención equivale a la extinción, o a la muerte.

Por eso no podemos imaginar el bienestar humano sin asociarlo al desarrollo.



¿De qué desarrollo hablamos?

Pero, ¿de qué desarrollo hablamos?.

La palabra “desarrollo” tiene tantos significados y matices, además de que puede ser contextualizada de tantas formas, que parece necesario aproximarnos a una noción común.

Cuando nosotros hablamos de desarrollo, nos referimos a una situación comunitaria que contenga a sus miembros, que reconozca a cada uno como individuo, afirmándolo en su libertad personal, estimulando en todos el cultivo de sus facultades y facilitando el logro de sus deseos.

Desde esa perspectiva, estimulamos a la producción cómo condición de la felicidad humana

De modo que la economía queda integrada a los objetivos comunitarios.

Sin que en ningún caso la comunidad se vea exigida a un éxito numérico o cuantitativo, destinado a la acumulación de un sólo sector social.



Aspectos del desarrollo sustentable

Esto implica la consideración de múltiples aspectos, entre los cuales el reconocimiento de la propia identidad (tanto en la historia, como en el presente) adquiere una importancia decisiva.

Desde el reconocimiento de la propia identidad, lo que implica asumir los aspectos posibilitarios tanto como las restricciones, los grupos sociales implicados definen sus objetivos, los que se integran (dentro de los posible) en un proyecto común construído sobre las coincidencias.

Y sólo desde allí, desde la participación comunitaria, con un enfoque básicamente incluyente, buscamos de definir las políticas, las propuestas y los programas que integren un desarrollo económico tan respetuoso de la sociedad, como del ambiente.



Lo global y lo local

¿Qué elegimos: el enfoque global, o el local?

Ninguno de ambos en forma completa, pero si aspectos de uno y otro, aplicados a distintos espacios y acciones.

Todo aquello referido a la supervivencia básica, como producción de alimentos, vestimenta sencilla y actividades artesanales o semi industriales que exijan tecnologías simples, tratamos de que sean satisfechas en forma local.

Para ello, buscamos promover mercados locales mediante el estímulo a formas de intercambio directas o al uso de instrumentos financieros que puedan ser regulados por la misma comunidad o por sus autoridades.

Para todos los otros productos y actividades, estimulamos la mirada global y el uso de las herramientas, de todo tipo, que proponen los mercados planetarios.



Las Tecnologías de la Información y de la Comunicación (TIC)

Si por un lado estimulamos la recuperación de una fuerte identidad local, por otro insistimos en la necesidad de acceder al uso de las mejores herramientas informáticas y de comunicación que estén al alcance de cada pueblo.

La ubicación geográfica y su proximidad a las redes de energía, de comunicación, y de datos instaladas, definen, en parte, las posibilidades de uso de estos recursos.

Sin embargo, aún en los lugares más remotos e inaccesibles, los sistemas de energía solar pueden proveer de la electridad necesaria y las redes satélitales de medios de comunicación y transmisión de datos.







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